Casos de psitacosis han sido hospitalizados en Argentina

en Argentina Argentina4 personas fueron hospitalizadas en la ciudad rafaela En el Condado de Santa Fe por neumonía bilateral loro, por un loro traído a casa por un paciente unos días antes de que aparecieran los primeros síntomas. Dos de las cuatro personas se encuentran en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Jaime Ferré, uno de los cuales se encuentra en estado inestable, mientras que los otros dos se encuentran en el servicio médico.


Son 4 adultos pertenecientes a una familia que vive en una casa del barrio Barranquitas de Rafaela, a unos 100 km al oeste de la capital. Santa Fe.


Este tema ha alarmado a las autoridades, ya que estas aves son comunes en Raffaella, ya sea en libertad o en hogares como mascotas.

recordatorio en loro :

la loro Es una enfermedad infecciosa bacteriana zoonótica causada por una bacteria Gram-negativa intracelular obligada, clamidia psittaci.

Las aves son el principal reservorio de esta bacteria, que fue aislada de 467 especies de aves, entre ellas aves del orden Psittacidae (guacamayos, periquitos, loris, guacamayos y guacamayos), animales de granja y ganadería (pavos, patos, gansos, etc.) y palomas. La enfermedad a menudo es manifiesta en Psittacidae y, a menudo, no es evidente en las aves de corral. C. psittaci Se excreta principalmente en los excrementos y secreciones de los ojos y la nariz de las aves infectadas.

La transmisión de persona a persona ocurre por inhalación de gotitas y polvo contaminado con excrementos o por contacto cercano con excrementos o secreciones de aves infectadas. La transmisión de persona a persona es posible pero muy rara. C. psittaci Sensible al calor ya los desinfectantes convencionales, resistente a las bajas temperaturas ya la sequía. Puede vivir varios meses en excrementos secos o secreciones nasales.

READ  Aparición de Les Ateliers d'Anticipa Salle en Guingamp Guingamp Martes 21 de marzo de 2023

Ciencia de las epidemias:

La psitacosis puede afectar a cualquier grupo de edad y género, pero la incidencia tiende a alcanzar su punto máximo en la mediana edad, con un rango de edad de 35 a 55 años. Es una infección rara que probablemente no se reporta. Puede ser especialmente endémica entre los profesionales que trabajan en presencia de aves infectadas o en su entorno sucio (excrementos, establos, vehículos de transporte, etc.). Entre ellos se encuentran criadores, recolectores de aves, veterinarios, empleados de tiendas de mascotas y zoológicos, empleados de mataderos, así como recicladores, laboratorios de análisis veterinarios, taxidermistas, etc.

clínica:

El período de incubación del loro oscila entre 5 y 15 días. La presentación clínica varía desde asintomática hasta una infección potencialmente mortal. En el caso de los síntomas, predominan las manifestaciones sistémicas (fiebre alta, escalofríos, cefalea intensa, mialgias, alteraciones de la conciencia) con un cuadro atípico de neumonía de aparición brusca o gradual, en ocasiones grave. La psiridosis puede afectar muchos órganos, dando como resultado daño al sistema nervioso central, daño cardíaco (endocarditis, miocarditis), daño renal y/o enfermedades gastrointestinales y/o reumáticas. Biológicamente se observan leucopenia, anemia hemolítica, trastornos de la función hepática y síndrome inflamatorio biológico. Una radiografía de tórax es anormal en 80 a 90% de los pacientes hospitalizados. La enfermedad generalmente progresa durante 10 a 14 días con una tasa de mortalidad del 10 al 20 % sin tratamiento, que es inferior al 1 % con un tratamiento antibiótico apropiado y temprano.

El tratamiento estándar es la doxiciclina. En caso de embarazo y en pacientes en las que esté contraindicada la doxiciclina, el tratamiento se basa en un macrólido (azitromicina o eritromicina).
No existe una vacuna contra la psitacosis.

READ  LGBTQIA +: El nuevo trato en la ciencia

La prevención de infecciones se basa en buenas prácticas de higiene del ganado, una combinación de medidas de bioseguridad y precauciones específicas para que no se “rocíen” excrementos de aves que puedan contener bacterias.

Fuente: ProMED.


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *